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La Ciudad estudia construir un teatro público de 500 butacas en el Barrio Mugica de Retiro

Se propone que allí se exhiban producciones realizadas por el Complejo Teatral Buenos Aires.

Con el fin de construir una sala pública en este barrio de Retiro, el cual se encuentra en proceso de integración socio-urbana, la secretaría de Transporte y Obras Públicas de la Ciudad de Buenos Aires realizó un llamado a licitación pública para elaborar el Proyecto de Arquitectura “Teatro Padre Carlos Mugica”. Se propone que allí se exhiban obras en general y del Complejo Teatral Buenos Aires.

En suma, quien resulte ganador de dicha licitación deberá presentar el proyecto de cómo sería la arquitectura de la futura sala, la correspondiente licitación pública y cuál debiera ser el presupuesto oficial.

En el pliego de especificaciones técnicas se proyecta que esta futura sala tendrá una superficie cubierta de 2200 metros cuadrados aproximadamente ya que el terreno tiene unos 1.400 m2; capacidad de sala teatro para 500 butacas; Hall principal con un espacio de exposición; espacio de recepción, boletería, guardarropas y 2 oficinas administrativas con sanitarios para personal; escenario con bambalinas, backstage y parrilla técnica sobre escenario; camarines para 12 personas; depósito de escenografía y espacio de expansión gastronómica interior y exterior.

Además, se describe que debe tener un espacio tienda; un aula divisible para talleres con mesada; sanitarios hombre/mujer en cada nivel; sala de máquinas; vestuario personal (15 personas) personal escenotécnico y personal de limpieza; ascensor (si el planteo lo requiere); sistema integrado de seguridad con cámaras y cerramientos de seguridad; accesibilidad acorde a normativa vigente; espacio de carga y descarga de insumos y escenografía.

En las especificaciones se indica que se debe tener en cuenta que se busca “un Edificio con identidad, que pueda albergar espectáculos en general y/o obras del Complejo Teatral Buenos Aires — CTBA”.

Las fuentes oficiales explican que se debe “recurrir a un lenguaje arquitectónico institucional y a la vez amigable, abierto y transparente hacia el entorno, ya que el edificio será un Faro de Cultura en el Barrio 31. Proyectar instalaciones con un concepto de eficiencia energética, teniendo en cuenta la optimización de las condiciones climáticas, de modo de reducir costos operatives”.

A su vez, desde el gobierno de la Ciudad agregan que buscan incluir un proyecto lumínico para el exterior, que de noche favorezca la seguridad del edificio y su entorno. Utilizar materiales de bajo mantenimiento, preferentemente nacionales. Contemplar la posibilidad de contar con un escenario “reversible” interior-exterior que permita producir obras o proyecciones al aire libre, integrando el área descubierta existente.

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